
Todos hemos planeado en nuestro ángel de la almacena en algún instante de nuestra vida. Esta fuerza espiritual la mayoria de las veces es poco reverenciada y también invocada por personas que ignoran el espectacular poder y también predominación que un ángel tiene la posibilidad de tener en el chato espiritual. Actúan como señales y nos acompañan en todas y cada una de las ocasiones y ocasiones de la vida. Por norma general, a cada individuo en el planeta se le da un ángel según el signo del zodíaco. En el artículo hablamos al querube que resguarda a los originarios de la Virgen… ¡Prosigue leyendo y aprende considerablemente más sobre este guardián!
La felicidad de Dios cae sobre Virgo
Revela el ángel según tu signo zodiacal
Aries
Tu ángel es el Arcángel Samael, es un asegurador ángel, que convierte el temor y la preocupación en seguridad y autovaloración. En consecuencia, la gente de este signo tienen mucha seguridad en sí mismos y una fuerte intención.
El Ángel de la Almacena de la Virgen: Rafael
El Ángel de la Almacena de la Virgen es el Arcángel Rafael. Este arcángel actúa el mundo Mercurio el miércoles y es responsable del este. El arcángel Rafael es uno de la ciudad de los ángeles sanadores mucho más esenciales, con lo que los originarios de Virgo tienen la posibilidad de ser enormes médicos o sanadores. Es el cuarto ángel en la jerarquía y nos ofrece salud.
El Arcángel Rafael asimismo entrega a Virgo atributos de eficacia y cabeza analítica, haciéndolo prestar mucha atención a cada aspecto y haciéndolo trabajador. A Virgo le agrada poder discriminar y sopesar todas y cada una de las opciones antes de tomar una resolución.
Virgo
Rafael es el ángel de la almacena de este signo, prestando asistencia a reconstruir enfermedades físicas y mentales.
Oración: “¡Uy, Rafael! Alumbra mi vida y hazme un individuo estructurada y organizada. Que por medio de estos dones logre educar la fe a todos y cada uno de los que aún desconocen su poder y fuerza. Protégeme en el trato con mi familia. Que mi forma de ser no aliene a la gente. Uy, Rafael, por ti solicito perdón a Dios. Lo siento si de forma frecuente deseo ser mucho más de lo que verdaderamente soy. Enséñame a trasmitir siempre y en todo momento paz y amor a el resto. Que de esta manera sea. Amén”.